Los perros, a igual que sus primos, los lobos, son animales muy jerárquicos, precisan de una jerarquía muy clara en su manada. Eso lo podemos trasladar a nuestra familia, que ocupará el lugar de la manada.
La mayoría de problemas de comportamiento, que se dan en los perros en general, es porque el dueño no asume eficazmente el papel de líder.
Desde su llegada a casa observará a los componentes de la familia con el fin de situarlos en su escala jerárquica.
Si deseamos que nos respete y obedezca debemos ocupar el sitio más alto, el de líder.
En ocasiones cometemos el error de pensar que se rigen por los mismos códigos de conducta que nosotros, lo que para nosotros es amabilidad, buenos modales, o empatía, para el perro es un signo de debilidad. A veces, con determinadas actitudes nuestras, sin quererlo afianzamos su dominancia y en algunos casos se pueden llegar a producir conductas indeseadas, como que el perro ejerza el derecho de corrección que tiene el líder cuando el Beta u Omega no obedece (marcar o llegar a la agresión)
Es importante tener en cuenta:
-Que el líder tiene derecho de paso siempre. Si el perro se cruza o está por el medio tumbado, es aconsejable ignorarlo y actuar como si no lo viéramos, y seguir avanzando, colocando la punta del pie debajo de su cuerpo suavemente, ya que si pasas por encima se dará cuenta de que le estás cediendo el paso.
-El líder come primero, dale la comida inmediatamente después de comer vosotros. Si pide comida en la mesa, hay que ignorarlo o incluso gruñirle, lo entenderá perfectamente, si insiste mirarle fijamente a los ojos y repetir el gruñido.
Si el perro es dominante, dejarlo comer solo, es mejor que no lo observéis mientras come, ya que esa es la actitud de los perros betas u omegas delante del perro dominante (que esperan su turno para comer)
Es importante que el perro, sobre todo si es dominante no duerma en sitios elevados ya que eso lo eleva de categoría.
-El líder tiene derecho a no ser molestado mientras duerme.
Si el perro viene a despertarte mientras duermes, actúa como haría en ese mismo caso otro perro dominante, gruñirle, hasta que desista.
-A los cachorros es importante acostumbrarlos desde el principio a que puedan ser manipulados, y poder explorar todas las partes de su cuerpo sin ofrecer resistencia, lo mismo con la comida.
¿Quién manda aquí cuando el perro...?
... Nos trae la correa o ladra delante de la puerta para que lo saquemos de paseo?.
... Cuándo nos trae la pelota para incitarnos al juego?.
... Cuándo nos golpea con el morro, o apoya la cabeza en nuestro regazo para que le demos caricias?.
En estos casos, claramente el que manda es el perro, que está afianzando su liderazgo, para compensar esto y mantener nuestro liderazgo, lo que podemos hacer, es después de la petición del perro, es darle una orden directa, como el siéntate u otra orden y acto seguido como recompensa, sacarlo, jugar con el o acariciarlo...
